Hoy en día, los negocios buscan cada vez más soluciones tecnológicas que les permitan mejorar la atención al cliente y optimizar sus procesos. Un software de punto de venta (POS) es una herramienta clave para el funcionamiento de cualquier negocio, ya que permite llevar un registro en las ventas, llevar el control de inventarios y agilizar el proceso de pago.
Sin embargo, con el auge del comercio electrónico, cada vez más clientes están acostumbrados a la posiblemente de ver el producto que van a comprar antes de adquirirlo.
Para entender esta necesidad, algunos softwares de punto de venta ofrecen la posibilidad de compartir la pantalla entre el cajero y el cliente.
¿Qué es compartir la pantalla?
Compartir la pantalla es la función que permite mostrar en tiempo real lo que se está viendo en la pantalla de un dispositivo a otra persona, en este caso, al cliente. Esta función es muy útil para realizar demostraciones, presentaciones o simplemente para compartir información de forma visual.
¿Cómo funciona el compartir pantalla desde un software de punto de venta?
Para utilizar la función es necesario que tanto el cajero como el cliente estén conectados a internet y tengan acceso a una computadora, tableta o teléfono inteligente. Algunos softwares de punto de venta permiten el acceso desde una aplicación móvil o a través de un enlace web.
Así, una vez que ambos dispositivos están conectados, el cajero puede compartir su pantalla con el cliente y mostrarle los productos disponibles en la tienda, así como sus características y precios. También pueden mostrar la información de su carrito de compras y los diferentes métodos de pago disponibles.
El cliente, por su parte, puede solicitar información adicional, hacer preguntas y recibir recomendaciones del cajero. De esta forma, se mejora la atención al cliente y se crea una experiencia de compra más personalizada y satisfactoria.
Ventajas de compartir pantalla entre el cajero y el cliente
La función de compartir la pantalla en un software de punto de venta ofrece una serie de ventajas tanto para el negocio como para el cliente, entre las cuales se encuentran:
Mejora la atención al cliente: Al compartir la pantalla, el cajero puede mostrar al cliente los productos disponibles en la tienda, explicarles sus características y precios, y responder sus preguntas de manera más efectiva y visual.
Permite una experiencia de compra más personalizada: Al conocer las necesidades y preferencias del cliente, el cajero puede ofrecer recomendaciones personalizadas y adaptar la experiencia de compra a sus intereses.
Agiliza el proceso de compra: Al mostrarle al cliente los diferentes métodos de pago disponibles y ayudarlo a seleccionar la mejor opción, se reduce el tiempo que se necesita para procesar la compra.
Fomenta la confianza del cliente: Al ver en tiempo real lo que está sucediendo en la pantalla del cajero, el cliente se siente más involucrado en el proceso de compra, por lo que tiene mayor confianza en la transacción.
Optimiza los procesos internos del negocio: Al compartir la pantalla, se reducen los errores de comunicación y se agilizan los procesos internos del negocio.
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